Un paquete de 24 botellas de agua ‘Refreshe’ cuesta 2,71 dólares para Jennie Sanford, mientras que a Emily Vanek, el paquete le cuesta 3,69 dólares. Y eso, ¿por qué?
La primera es gerente de proyectos, mientras que la segunda es bloguera. ¿Es eso relevante? Lo cierto es que no. La diferencia reside en sus hábitos de compra: la señora (o señorita) Sanford es consumidora habitual de productos ‘Refreshe’, mientras que la señora Vanek, no lo es.
Esta es una muestra de la estrategia que ha adoptado la cadena de supermercados Safeway, líder en Reino Unido, para incrementar sus ventas y las visitas a sus establecimientos.
Basándose en los datos recogidos por la tarjeta de fidelidad de cada cliente, el sistema analiza sus hábitos de compra y ‘crea’ descuentos personalizados. De esta forma, la Sra. Sanford recibe un aliciente extra para poner en su carrito este producto de ‘Refreshe’, y se le anima a que continúe consumiendo productos de la marca, siempre que sean adquiridos en Safeway.
A pesar de que la utilización de los datos personales de los clientes podría plantear problemas, la mayor parte de los consumidores están a favor de iniciativas como ésta, que les permiten beneficiarse de un mejor precio en sus compras más habituales, como afirma Michael R. Minasi, presidente de Marketing de Safeway: «Si la información al consumidor es la adecuada, la personalización de los precios es realmente algo deseado por los consumidores en estos momentos, y no algo que temer.»
Aunque por otra parte, Joseph Turow, profesor de la Escuela de Comunicación Annenberg de la Universidad de Pennsylvania, cree que los compradores deben tener cuidado, ya que la fijación de precios por parte de los supermercados no es lo suficientemente transparente para dar a los consumidores un poder real de elección. Y además, también hay dudas sobre si esta práctica es del todo legal, ya que roza el límite de la justicia.
Vosotros, desde el punto de vista tanto de retailers como de consumidores, ¿qué opináis? ¿Estáis a favor de campañas de marketing que utilizan vuestros datos personales, aunque sea (en apariencia) en vuestro beneficio? Y la idea de Safeway, ¿os parece una buena forma de conseguir tráfico a las tiendas físicas?
Para ver el post original: Descuentos personalizados, la nueva estrategia de los supermercados.